Al norte de Zaragoza muy cerca a los Pirineos está Huesca, una pequeña ciudad en la que casualmente coincidimos con sus fiestas patronales, las fiestas de San Lorenzo. Fue una experiencia muy interesante ya que toda la ciudad se vuelca en la fiesta. El día que comienzan hay un evento protocolario en la plaza principal donde el alcalde da inicio oficial y luego empieza la locura total! Hay desfiles de comparsas o Peñas bañándose con garrafas de vino y bañando a todo aquél que se cruce por su camino y fiesta por todas partes. Así uno se resista, acaba haciendo parte de ella. Las fiestas duran unos días más donde hay eventos de todo tipo.
Aparte de las fiestas la ciudad tiene mucho encanto medieval con iglesias tranquilas y oscuras. En la catedral se puede subir a la torre desde donde hay una muy bonita vista del paisaje.
Muy cerca a Huesca, en tren se puede llegar a Jaca. Es un pequeño pueblo en los Pirineos españoles que fue la primera capital de Aragón . Tuvimos un día de lluvia y encontramos desafortunadamente la ciudadela fortificada cerrada por un evento! (solo ese día durante todo el 2015 estaba cerrado por motivos especiales!!! Cosas de viaje...).
La catredal de estilo gótico es increíble y monumental, y todo el pueblo es absolutamente precioso. Muy recomendado el paseo hasta allá.
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